Hace unos días vi en Twitter, en la cuenta de AlliveSSevilla (@AllivesSevilla),
una imagen de la Cabalgata de 1955, en
la que los SSMM fueron encarnados por D. Juan Belmonte, D Juan Ignacio Luca de
Tena y D. Antonio Leal Castaño
Esa foto, que me encantó y que he rescatado del archivo
familiar, me recordó una asignatura que tengo pendiente desde hace tiempo y que
no es otra que no dejar morir la memoria de mi abuelo y plasmar de alguna
manera su apasionante vida, tan unida a la ciudad de Sevilla, al mundo del toro
y al Sevilla FC.
Como ni mi tiempo ni mis capacidades literarias me permiten
escribir un libro, empezaré a rescatar esa memoria en este blog que hoy
inauguro.
Me centraré solo en la parte taurina, afición inculcada por
mi padre de manera directa, pero en la que mi abuelo tuvo una importancia
decisiva, pues durante muchos años ejerció como cirujano jefe de la Maestranza
de Sevilla a la par que era el médico del Sevilla FC.
Aprovecharé también el blog para rememorar episodios
históricos de la tauromaquia, comentar la actualidad taurina y resaltar los
eventos taurinos que Dios me permita vivir en primera persona. Tranquilos que
no hablaré de futbol.
La foto que publico de la Cabalgata de 1955 me lleva a
inaugurar el blog un día tan señalado
como el 5 de enero. Día de la Cabalgata, día de la ilusión por antonomasia y
día taurino donde los haya. Observamos
de izquierda a derecha a Juan Belmonte, El Marqués de Luca de Tena y Antonio
Leal.
Esta es solo una muestra de lo taurina que es la Cabalgata de Sevilla y de la vinculación que siempre ha tenido con el mundo del toro en cualquiera de sus facetas.
Basta solo recordar que la Cabalgata del Ateneo de Sevilla sale por vez primera en
el año 1918 desde la sede del Teatro San Fernando en la calle de Los Lombardos,
hoy Muñoz Olive, pero que ya en 1919 comienza a salir desde la Real Maestranza,
lugar de organización e inicio de su recorrido durante más de treinta años.
Foto de la Cabalgata de 1919, primera vez que sale de la Plaza de Toros de Sevilla. |
El primer torero que encarnaría a un Rey Mago fue Manolo González en 1949.
Luego un enorme elenco de matadores de toros recorrieron
las calles de Sevilla.
Miguel Báez Litri (1950), Juan de Dios Pareja Obregón ( 1953), Juan Belmonte (1955),
Gregorio Sánchez (1956), Jaime Ostos (1958), Manolo Vázquez (1959) Pepe Luis
Vázquez (1960), Diego Puerta (1965), Palomo Linares (1967), José Luis Parada
(1971), Curro Romero (1974), Antonio Ordoñez (1976), Espartaco (1987) y Eduardo
Dávila Miura (2013). El toreo a caballo también tuvo su rey mago cuando Álvaro
Domecq salió en 1966
A esta nómina se unen ganaderos como Fernando de la Cámara
(1959) José Luis de Pablo Romero (1964), Javier Guardiola (1969), Eduardo Miura
(1972) y Gabriel Rojas (1975).
Diodoro Canorea, empresario de la Plaza, salió en 1982 e
ilustres Maestrantes siempre han figurado en el cortejo real.
Pido disculpas si olvidé a alguien relacionado con el mundo
del toro.
Comienzo pues este blog taurino en el día de la ilusión por excelencia
recordando aquella Cabalgata de 1955.
El diario ABC del 6 de enero de 1955, que como curiosidad
tenía 38 páginas y se vendía al precio de 1 peseta, abría con el siguiente
titular:
Cito parte de la crónica a continuación, porque creo que resulta muy significativo si las comparamos con las que se hacen en la actualidad se trate del asunto que se trate.
“ En la confluencia de la calle Menéndez Pelayo con la
Avenida de Cádiz, los Reyes descendieron
de sus tronos y acompañados de sus pajes, el Presidente del Ateneo, directivos
y organizadores, se dirigieron en autocar a los centros de beneficiencia en los
que habían de hacer personalmente la distribución de los juguetes y golosinas.
Fue el primero de dichos centros el Hospital San Fernando de
la calle Cardenal Cervantes, donde los Monarcas, a los sones del Himno
Nacional, fueron recibidos por el Alcalde, varios capitulares y personal rector
del establecimiento. Los niños de ambos sexos allí acogidos se agolpaban en el
patio, engalanado con gallardetes y reposteros. Melchor, Gaspar y Baltasar,
después de adorar al Niño Jesús, entre el continuo palmotear de los pequeños
ocuparon sitiales bajo rojo dosel. Acto seguido comenzó el reparto , que como
siempre fue rico en emociones.”
Una delicia de extracto de crónica sin lenguaje de género, ni complejos ante el Himno Nacional o la Adoración
al Niño Jesús.
Mi madre, en una época en la que las mujeres no podían salir
de paje de los Reyes, aprovechando el maquillaje negro tuvo el privilegio de
acompañar a mi abuelo en el Cortejo. Quizás fuera la primera mujer que salió de paje con un Rey Mago en Sevilla. Faltó poco para que no lo hiciera porque poco antes de salir la Cabalgata uno de los palos que sujetaba el dosel de la carroza cayó sobre su cabeza y mi abuelo , ante la atónita mirada de los ateneístas, exclamó ¿Te ha pasado algo, hija mía?.
Ella recuerda que Juan Belmonte era muy callado y prácticamente
no habló en el tiempo que coincidieron. De hecho en los discursos que los Reyes
Magos pronuncian en la cena que el Ateneo ofrece tras la Cabalgata solo
hablaron D. Juan Ignacio Luca de Tena y mi abuelo.
Cuando Juan Belmonte sale de Rey Mago tiene 63 años y estaba
mayor. Llevaba mucho tiempo retirado como matador de toros. Siete años más
tarde moriría
Mi abuelo coincidía mucho con Juan Belmonte en la tertulia
de “Los Corales” en la calle Sierpes.
Belmonte era íntimo amigo de Rafael “El Gallo”. Recuerdo a
mi abuelo contando que El Gallo siempre decía que Belmonte y él eran tan amigos
que a veces pasaban cinco horas juntos sin hablar a lo que añadía “hay muchos
amigos con los que se puede hablar mucho
tiempo, pero pocos con los que se pueda estar callado mucho tiempo”.
Cuando los Reyes visitaron el Hogar de Beneficiencia, Juan
Belmonte se acercó a mi abuelo y le dijo. “D. Antonio, que alegría ser niño y
tener tanta ilusión aunque no tengas “na”.
A muchos mayores que pensamos que tenemos “de tó” nos haría falta la ilusión de
estos niños”.
En la imagen con la que cierro el blog por hoy se ve al Dr
Leal escuchando las peticiones de un niño con la mirada de Juan Belmonte al fondo, que lo dice
todo.
Amigos, no perdamos la ilusión, ni en este día ni en nada de lo que hagamos.
Que Dios reparta suerte.
Magnífica redacción de los orígenes de la tradición taurina en una fecha tan señalada como la de hoy.
ResponderEliminarGracias por tu comentario Manolo. Un abrazo
EliminarMe ha encantado, Manolo, ya te lo he comentado. Muy bonita la idea de no permitir que se olvide a nuestros mayores, más por estos medios que son los que usan nuestros hijos.. Enhorabuena!
ResponderEliminarGracias Victoria. Intentaremos hacerlo ameno. Un abrazo
EliminarMagifica iniciativa Manolo. Por desgracia no tengo muchos recuerdos de mi niñez con el abuelito, ya que falleció cuando yo era muy pequeño, pero su memoria siempre ha estado muy presente en la vida de nuestra familia.
ResponderEliminarGracias Antonio. Un abrazo
EliminarEnhorabuena Manuel por este Blog. Nos dará muchas alegrías. Tu Tertulia te desea lo mejor. Un abrazo.
ResponderEliminarMuchas gracias a la Tertulia, donde aprendo tauromaquia cadavez que voy. Excelentes aficionados y mejores personas
Eliminar👌👌👌
ResponderEliminarGracias, campeon. Joven aficionado ya identificado. Mi hijo Mauricio que me acompaña a múltiples festejos y evemtos
EliminarEnhorabuena Manolo por tu gran abuelo y por esta magnífica iniciativa.
ResponderEliminarGracias Eduardo. Gran cirujano que sabe lo que significa lidiar en ese campo. Un abrqzo
EliminarQué bueno, Manolo. Enhorabuena. Me ha encantado. Qué interesante, qué ameno. Espero leer muchas cómo esta a partir de ahora.
ResponderEliminarMuchas gracias Ignacio. Me halaga tu comentario pies eres persona culta y con sensibilidad especial para temas de este tipo. Intentare que sigas leyendo muchas similares. Un abrazo
EliminarManolo me ha encantado
ResponderEliminarNo tuve la suerte de conocer a nuestro abuelo me parece increíble
Muchas gracias
Gonzalo Leal-Graciani
Gracias Gonzalo. Un abrazo
EliminarGracias Gonzalo. Un abrazo
EliminarEnhorabuena al autor del recién estrenado blog por su magnífica idea. Está primera entrega, me ha llevado a otros tiempos entrañables, que recuerdo con gran ilusión. Qué gran abuelo, y que felices momentos vivió el Dr. Leal !!!
ResponderEliminarMuchas gracias Julio. Se tu gran nivel de exigencia en todo y me motiva tu comentario. Reflejaremos anecdotas acontecidas en tu barrio del Arenal. Un abrazo
EliminarQué sorpresa saber que también escribes jeje ya sabes que yo no soy taurina, pero si de algo me ha servido conocer a gente en mi vida como tú, como tú familia y como más personas que han pasado de diferente ideología, religión etc es que la vida no es a o b. La vida tiene todo un abecedario en el que cada uno decide elegir una letra y es totalmente respetable.
ResponderEliminarMuchísima suerte en tu nueva aventura. Todo lo que se hace con pasión es bueno para el espíritu y llena.
Yo por eso también este año me lancé a hacer el canal de youtube jeje año de valientes.
Un abrazo.
Muchas gracias por tu comentario Lucia. Te felicito por tu comprensión y tolerenccia , aun no siendo aficionada y conociendo tu forma de pensar acerca de los animales. Mucha suerte en tu canal de youtube, que acabo de ver y es magnífico. Un abrazo
ResponderEliminarGracias Manolo por tu magnífica crónica. Gran recuerdo de un día tan señalado como el de hoy y al Dr. D. Antonio Leal Castaño. Enhorabuena.
ResponderEliminarGracias Manolo. Un relato muy entrañable. Me ha encantado. Felices Reyes.
ResponderEliminarMuchas Gracias D Manuel esto es ina Maravilla me ha encantado
ResponderEliminarPrecioso Manolo
ResponderEliminarQuieran o no esta es la historia y afortunadamente la cuentas de primera mano. Tal y como fue y con la fortuna de que los protagonistas son qiien son. Enhorabuena por el relato y por la iniciatiba.
Perdón iniciativa.
EliminarManolo me ha encantado la historia de tu madre como paje del rey Baltasar. Y también me ha parecido muy reveladora de la personalidad de Belmonte la confidencia que le hizo a tu abuelo. Un abrazo y sigue escribiendo para tus seguidores.
ResponderEliminarGracias Manolo por tus crónicas tan señaladas y, recordarnos una vez más la grandeza del Dr. D. Antonio Leal Castaño, tu abuelo, en un día tan señalado cómo el de hoy. Un abrazo.
ResponderEliminarMuy Grande D. Manuel espectacular que bueno muchas Gracias un Gran Abrazo
ResponderEliminarMuchas gracias Manolo, ya creo que tienes casi para publicar tu primer libro. Anímate!!! Un fortísimo abrazo
ResponderEliminarBuenos días!! Accedo hoy este Blog y me ha encantado. Por la iniciativa que tuviste y por haberla mantenido. Espero poder disfrutar de lo ya escrito y de lo que queda por venir!!
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